RESEÑA: Las alas de Sophie

 

- Título: Las alas de Sophie

- Autora: Alice Kellen

- Páginas: 

- Editorial: Planeta

Cuando Sophie se enamoró de Simon, supo que juntos tejerían una inolvidable historia llena de vivencias y canciones, pero todo acabó una noche de enero y sus sueños se quedaron congelados en aquel invierno eterno, el más largo y frío que nunca pudo imaginar. Hasta que el hielo empieza a derretirse para que Ámsterdam se vista de primavera. Entonces, Sophie descubre que Koen estará a su lado cuando decida alzar el vuelo, que su familia y amigos son su brújula, que ganar requiere de ingenio y que el corazón sigue sus propias reglas.

Sophie está viviendo uno de los mejores momentos de su vida junto a la persona que ama. Sin embargo, el día menos pensado su vida da un giro de 180 grados. Esto hace que empiece a ver las cosas de otra manera, y que empiece a disfrutar de las pequeñas cosas de la vida como si fuera el último momento que tiene para disfrutarlas.

Aunque no le va a resultar fácil volver a emprender el camino de la vida, puesto que su vida acaba de tener un duro golpe. Le va a costar recomponerse, incluso habrá momentos en los que intente darse por vencida.

 

No le resulta fácil salir a la calle y ver cómo todo el mundo sigue con su vida como si no hubiera pasado nada, cuando para ella todo ha cambiado. Sophie va a vivir los meses más duros de su vida, y le va a costar volver a ser ella misma, volver a reír y volver a divertirse. Pero para ello tendrá a sus amigos, y a su hermana para ayudarla.

 

Sophie es una joven de 29 años, que trabaja en una editorial como editora de libros infantiles. Es una chica muy metódica, organizada y le encanta hacer listas de cualquier cosa.

Tras el duro golpe que sufre, vamos a ver a una Sophie diferente, cerrada en sí misma, que cuando está nerviosa o frustrada siempre decide limpiar su casa y dejarla perfecta. Todo esto hace que se aleje un poco de sus amigos, y familia. Pero aunque ellos no se van de su lado, sí es cierto que ella no se ve con fuerzas para seguir adelante.

 

La historia está contada en dos tiempos, el presente en el que vemos a una Sophie devastada por lo que acaba de ocurrir, y el pasado, cuando ella estaba en la universidad y conoce a todos sus amigos.

Es por eso que nos encontramos dos partes muy diferentes en el libro, puesto que mientras que en el pasado todo adquiere un toque gris, porque es más triste, y nosotros sufrimos por todo lo que está viviendo Sophie. Por otra parte, el pasado nos trae buenos momentos, aventuras entre los amigos, amores, secretos, y momentos divertidos e inolvidables que vivieron todos los personajes.

Me ha gustado que hubiera estos saltos en el tiempo, porque así llegamos a conocer más en profundidad cómo se formaron esas amistades y entendemos cómo están todos en este momento. Cómo han cambiado sus vidas a lo largo de los años, qué les hizo unirse y ser amigos, y por el contrario, qué hizo que algunos se alejaran.

Además, es otra manera de ver y descubrir los sentimientos y pensamientos de Sophie. Puesto que en el presente vemos a Sophie en una especie de bucle, del que no consigue salir. Está sufriendo, y eso lo refleja en cada pensamiento.

 

En cuanto a los demás personajes, Koen es el que toma más protagonismo, juntos con la hermana de Sophie. Es cierto que me habría gustado que tuviera más presencia, y que se hablara y explicaran muchas más cosas acerca de él y su vida. No me habría importado que hubiera habido algunos capítulos contados desde su punto de vista. Porque así no solo sabríamos la versión y la realidad de Sophie, sino también de otros personajes que la rodean.

Es por eso que el hecho de que no se hable mucho sobre él, hace que se vuelva misterioso, y te entre curiosidad sobre cómo es y sobre su personalidad. Solo, según nos acercamos al final del libro, se deja entrever algo. Y eso que ha sido un personaje que me ha gustado, y sobre todo por lo que ocurre con él, pero me habría gustado algo más.

Y eso es lo que me ha pasado en general con todo el libro. Me esperaba un poco. Es una historia diferente, en la que vemos a una chica sufrir, y la mayor parte del libro vamos a ver cómo poco a poco va intentando salir del pozo en el que se encuentra. Eso hace que pueda llegar a ser algo repetitivo, pero gracias a todas las anécdotas e historias de aventuras que Sophie va recordando de hace unos años con sus amigos, pues hace que sea más ameno, divertido, y que te den ganas de saber más sobre ellos.

Si no hubiera sido por esos momentos del pasado, se me habría quedado el libro muy vacío, e incluso habría sido un poco deprimente y desesperanzador leer por todo lo que Sophie está pasando. Desde el inicio del libro nos mete de lleno en este suceso. Empieza fuerte, y eso hace que durante todo el libro estés con un nudo en el estómago, y con las lágrimas a flor de piel.

 

Es cierto que el inicio me ha gustado mucho, por eso de que empieza fuerte, y aunque el final es muy muy predecible, también me ha gustado. He sentido que todos los personajes se merecían ese final que le ha dado la autora, así que en ese aspecto me ha parecido que todo ha acabado como debería. Además, al final ocurre algo muy bonito relacionado justo con el título del libro, que me ha encantado (no puedo decir mucho más).

La mayor parte de la historia ocurre en Amsterdam, durante diferentes meses del año. Es una ciudad a la que me gustaría ir próximamente, y es que la autora ha conseguido transportarme allí, recorrer sus calles y los canales, he incluso sentir el frío del invierno. Sin duda, eso me ha encantado. 

Es un libro que para leerlo, hay que estar un poco preparado. Al leer el principio sabréis si estáis preparados o no para leerlo, ya os daréis cuenta de porqué. Pero es una lectura que se hace amena, y que entretiene, que está llena de sufrimiento y sentimiento. Además, hay momentos reflexivos que te hacen valorar cada pequeño momento de la vida. Así que os recomiendo su lectura, porque vais a aprender mucho con Sophie. 

3/5